Dos locos. Dos locos enamorados, que sin darse cuenta no pueden vivir sin la otra piel, la de la otra persona... que si se marcha su otro 'yo' se pierden. Les duele la distancia aunque sean milímetros. Dos locos que no saben si se puede amar mar. No saben engañarse, no saben no quererse. Especie extraña la nuestra, algo que ya no se ve común, eso de quererse mas de una semana...
Me describo como alguien difícil, alguien difícil de aguantar y un poco descontrolada. Que te quiere. Me describo como alguien desordenada, desorientada y desorbitada. Que te quiere. Me describo y me llaman como alguien difícil de entender. También dicen de conocerme muchas personas pero yo creo que no tienen ni idea. No saben qué siento cuando dicen que me quieren y tampoco saben lo mucho que me importan las cosas. Seguramente la gente tampoco conocerá en qué momento estoy realmente mal, pero en cuanto no puedo yo sola pido ayuda. Soy una persona que habla, habla, habla y no calla. Las cosas importantes me cuestan decirlas y antes las mentiras me resultaban indiferentes y no me costaba usarlas a veces en cosas sin importancia pero hay personas que me enseñaron algo que no eran, algo que decían ser y no eran, me enseñaron a creerme todo lo que me decían; me cegaba con todo, era una niña estúpida que amaba deprisa y nunca se creía del todo lo malo. Hasta que un día todo cambió y sinceramente me alegro de que pasara. Me ayudó a ser quien soy. Me enseñó que las mentiras por muy 'sin importancia' que sean importan. Duelen. Aprendí que un error puede traerte miles de aciertos. Y mis mil aciertos son esa persona que hace que me convierta en alguien grande, gigante, enorme. Hace de mi persona alguien feliz.
¿sabes la sensación que tienes al ver como todo se te va escapando de las manos? cuando no sabes cuanto te durará esta vez lo bueno. Cuanto tiempo durará tu sonrisa esta vez. La sensación de hundirte como si de un océano se tratara... dando la impresión de que alguien te agarra de la pierna y no deja que nades para coger oxigeno. La sensación de ahogarte, con tus propios pensamientos. La sensación de que te pesa algo en el pecho y no tienes por donde escaparte... Sin saber a que sitio irte porque de nada sirve porque eso tampoco hace que te sientas mejor.
Siempre he sido una persona complicada. Y la verdad es que por mucho que la gente diga entenderme yo se que nunca se acercan a como veo yo las cosas. ¿sabéis tener la necesidad de un abrazo las 24h? que alguien aunque no te entienda, esté ahí, con las manos abiertas para recogerte del suelo cuando vea que se te escapa felicidad por el rabillo de los ojos. Con la boca abierta para recoger besos con dolor y amor mezclados. Con los oídos al tanto de cualquier derrame de risas... ¿sabes? cuando te sientes solo y solo alguien puede hacerte olvidar todo. Completamente todo. No me refiero a un segundo o dos. Si no constantemente. Por el día cuando después de haber tenido una noche llena de pesadillas te das la vuelta y tienes un mensaje que describe lo bonita que él te ve. O cuando por la noche no se despega de ti, ni tu de el. Por no perder ni un segundo. Por si se termina. Por si se marcha y no vuelve.
¿sabes? cuando ese alguien es tu trampolín y cuando no hace más que enamorarte día si y segundo también.
...
¿sabes? Sé que no. Nadie lo sabe.
sensación: Impresión que las cosas producen en la mente por medio de los sentidos.
la sensación de un abrazo, o de llegar a tu cama y encontrarte con la persona que hace que las cosas, en general, se esfumen... es uno de los mejores placeres que podría haber. El incorporarte junto a él, que te acaricie y que de verdad, sin que el tenga que decirte nada tú sientas lo que hay. Lo que es lo vuestro. Las sensaciones. El verbo que es sólo valido para él. El sentir su corazón latir cuando te tumbas encima... o sencillamente el sentir que algo no va bien. La sensación de tranquilidad que te emite, o la cómo hace que te sientas cuando te aprieta la mano mientras paseáis. La sensación de no andar perdida. La sensación de estar haciendo lo correcto. De que este es mi camino. La sensación de no querer soltarle mientras dais ese paseo por miedo a perderle. Esa sensación que a veces se te cruza por la cabeza y piensas que en vez de comer o de estar mirándote en el espejo podrías hacer esto o lo otro junto a esa persona... por si se acaba. Por si hoy es el ultimo día de toda mi felicidad...
Pero.
Tú haces que eso se difumine un poco. El miedo a perderte siempre estará presente. El miedo a que un día decidas marcharte a otro lugar, que cojas otra mano con fuerza mientras das un paseo, o que acaricies otra mejilla con la misma suavidad que lo haces conmigo, siempre estará ahí. Pero ahora te tengo y ahora siempre, siempre, siempre... seré feliz. Porque por mucho miedo que tenga... de repente llegas tú y me lo quitas todo.
